Después de instalar una distribución de Linux, hay algunos pasos que debemos seguir para configurar nuestro sistema operativo y aprovechar al máximo sus funcionalidades. Estos son algunos de los aspectos más importantes que debemos tener en cuenta:
- Actualizar el sistema: lo primero que debemos hacer es actualizar el sistema para obtener las últimas versiones de los paquetes instalados y corregir posibles errores o vulnerabilidades. Para ello, podemos usar el gestor de actualizaciones de nuestra distribución o ejecutar el comando `sudo apt update && sudo apt upgrade` en una terminal (si usamos una distribución basada en Debian o Ubuntu).
- Instalar los drivers necesarios: dependiendo del hardware que tengamos, puede que necesitemos instalar algunos drivers adicionales para que todo funcione correctamente. Por ejemplo, si tenemos una tarjeta gráfica Nvidia o AMD, podemos instalar los drivers propietarios desde el gestor de controladores de nuestra distribución o desde una terminal con el comando `sudo ubuntu-drivers autoinstall` (si usamos Ubuntu o derivados).
- Instalar los programas que necesitemos: una de las ventajas de Linux es la gran variedad de programas que podemos encontrar para realizar todo tipo de tareas. Podemos instalarlos desde el centro de software de nuestra distribución, desde una terminal con el comando `sudo apt install nombre-del-programa` (si usamos una distribución basada en Debian o Ubuntu) o desde fuentes externas como repositorios PPA, paquetes Snap, Flatpak o AppImage.
- Personalizar el entorno de escritorio: otra ventaja de Linux es la posibilidad de personalizar el aspecto y el comportamiento de nuestro entorno de escritorio. Podemos cambiar el fondo de pantalla, el tema, los iconos, las fuentes, los efectos, los widgets, etc. desde las opciones de configuración de nuestro entorno o usando herramientas como GNOME Tweaks, KDE System Settings o XFCE Settings Manager.
- Aprender a usar la terminal: la terminal es una herramienta muy poderosa que nos permite realizar todo tipo de operaciones con nuestro sistema operativo. Podemos ejecutar comandos, administrar archivos, instalar programas, configurar servicios, etc. Aunque no es imprescindible saber usar la terminal para usar Linux, es muy recomendable aprender lo básico para aprovechar todo su potencial.